Demoler el pasado

Diario Sur
Ecologistas y arquitectos reprochan la falta de inspección técnica de edificios. La Ciudad incumple su acuerdo de rehabilitar 'Casa Acevedo' para fines sociales
15.05.08 - TEXTO Y FOTOS: ELSA CABRIA / CEUTA

CASA ACEVEDO. Declarado en estado de ruina técnica.
Entre 1910 y 1920 el arquitecto Santiago Sanguinetti diseñó un edificio de cuatro alturas en el número cuatro de la calle González de la Vega. Levantó un ilustre inmueble de fachada modernista con toques art-decó en el que vivió la familia de Juan Acevedo, miembro fundador de la Cámara de Comercio local, hasta que el Gobierno de Ceuta compró la parcela en 1986 para realojar a las familias que vivían en el recién demolido cuartel del Revellín. A cambio, el Ejecutivo se comprometió a rehabilitar el bloque «para uso social y cultural». Durante un siglo, 'Casa Acevedo' ha sobrevivido en el centro de la ciudad, pero hace seis meses se dictaminó su derribo. Después de 22 años en manos de la Ciudad, ha acabado en estado de «ruina técnica». En ese tiempo no ha experimentado ni una sola rehabilitación.

«Ceuta se ha convertido en una ciudad anodina que ha perdido su identidad arquitectónica», dice el presidente de Ecologistas en Acción, José Manuel Pérez, que contempla preocupado cómo desaparecen edificios históricos para la venta de la parcela a promotores privados o a la Administración Pública. «De la calle Velarde original casi no queda nada, en la calle Alfau, sólo algunos edificios, se cedió el uso del cuartel de las Heras y de Ybarrola...». A su juicio, el Gobierno del Partido Popular, que hace gala de proteger el patrimonio ceutí, «ha degradado sin concesiones la estética de la ciudad».

En el caso de de la parcela donde reposa 'Casa Acevedo', la Ciudad va a cederla a Emvicesa para levantar otro bloque de pisos. Para evitarlo, Pérez ha pedido a la Ciudad que rehabilite el inmueble, tal como acordó en 1986 y que lo incluya en el Registro de Bienes Protegidos y Servidumbre. «Han usado la táctica de declarar el piso en ruina para poder construir», denuncia el conservacionista.

El Gobierno de Melilla redactó hace unos años una ordenanza «para evitar esas estrategias». Tanto es así que en el preámbulo del documento se reconocía como habitual este tipo de actuaciones irregulares y por esa razón se lanzaron a proteger su patrimonio cultural. Mientras eso no ocurre en Ceuta, para frenar la demolición «masiva» de edificios singulares, Ecologistas en Acción propone que se implante una inspección técnica de edificios. Esto es, los propietarios solicitarían revisiones periódicas para mantener y conservar su bloque. «Eso implicaría mayor transparencia en las declaraciones del estado físico de un inmueble», reseña.

Los arquitectos

El Colegio de Arquitectos defiende también la necesidad de que se legisle y desarrolle en materia de inspección de edificios. Su presidente, José Luis Marín, explica que sería «como una ITV urbanística». Y ejemplifica la solución en esa línea. «Los ceutíes están dispuestos a gastarse 3.000 euros en arreglar sus coches, pero no en mejorar los pisos de segunda mano con lo caros que salen al final», señala.

Pero eso sí, asegura que «la Ciudad no tiene interés en demoler edificios, de hecho muchas veces no favorece los intentos de los propietarios de declarar su estado ruinoso». Sin embargo, si reconoce que «el Gobierno local debería preocuparse mucho más en proteger su propio patrimonio».

Para subsanar la carencia, Marín recomendaría que el Ejecutivo local realizase un estudio de patologías de los edificios (pilares, cimentación, aceros, hormigones, etc.). «La calidad constructiva de muchos edificios en esta ciudad y la elevada humedad deberían provocar un replanteamiento en materia de conservación de patrimonio arquitectónico», opina.

El vecino del 2º A

Desde 1986 algunos vecinos de 'Casa Acevedo' han variado. Este es el caso de Juan José González que lleva catorce años viviendo en el 2ºB. Hace tiempo que las seis familias y los dos establecimientos que hay en el edificio saben que querían derribarlo, pero la velocidad de los acontecimientos se ha disparado. En octubre se lo comunicaron por carta. En diciembre se reunieron con el consejero de Fomento y hace un mes con el de Hacienda. Les informaron de que el plazo máximo de derribo no excedería de diez meses y ya no saben nada más.

«A algunos les han prometido un realojo, pero a otros, no, estamos a la expectativa », lamenta González junto a su vecino del 1ºA, José Manuel Machuca. «Somos familias numerosas y aquí nadie pondrá un pie si nos ofrecen pronto una solución», advierte el segundo inquilino. Los conservacionistas se esfuerzan por evitar que 'Casa Acevedo' se convierta en un amasijo de ladrillos y hormigón para ser sustituido por un bloque de viviendas. «Este Gobierno no tiene interés por proteger el casco histórico».

Fuente: Diario Sur