El Ayuntamiento censó casi 300 viviendas en mal estado en toda la ciudad en 2006

ABC de Córdoba
27-2-2007 07:45:34
A. R. V. / R. A.

CÓRDOBA. La ruinosa vivienda del número 29 de la calle Moriscos no es un caso aislado. Por toda la ciudad hay fachadas semiderruidas, paredes llenas de desconchones y techos que parecen venirse a pique al menor golpe de viento.

El Ayuntamiento de Córdoba tramitó más de 280 expedientes de inmuebles en mal estado durante el pasado año, de los cuales la mayoría se localizaron en el Casco, según informaron ayer fuentes de la Gerencia Municipal de Urbanismo. Barrios populares como San Andrés, San Pedro, la Judería o Santa Marina concentran el mayor número de casos.

Muchos de estos expedientes terminaron en órdenes de ejecución de obras por las que se requería al propietario del inmueble a arreglar con mayor o menor urgencia las fachadas, voladizos, cubiertas y demás elementos que pudieran ser susceptibles de caer a la vía pública. En los contados casos en que el dueño hizo caso omiso a la resolución, la propia Gerencia de Urbanismo se hizo cargo de la reparación y luego le endosó la factura.

La declaración de ruinas es el paso previo y preceptivo a la orden de demolición de la casa y debe acompañarse siempre de un anteproyecto, según estipula el PGOU.

Más de 1.400 expedientes

Según ha podido saber ABC, desde 1995 el departamento de Ruinas de Urbanismo ha tramitado más de 1.400 expedientes -entre 250 y 300 cada año- por viviendas con desperfectos. Éstos abarcan un espectro amplio, desde daños superficiales causados por un exceso de humedad en las paredes hasta fachadas a punto de sucumbir.

En ocasiones, detrás de una declaración de ruinas se esconde un interés especulativo. El propio casero se desentiende del deber de mantenerlo en condiciones a fin de forzar la salida de sus inquilinos de renta antigua y levantar así coquetos apartamentos que luego multiplican su valor en el mercado.

El Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico, de 2003, ya advertía de que cerca de 4.000 viviendas están vacías o abandonadas en el Casco, uno de los más amplios de Europa. El documento, que incluye un extenso catálogo de bienes protegidos, recoge un recetario de medidas para revitalizar esta zona de la ciudad, que ha sufrido los efectos de la despoblación, contrarrestada en los últimos años con el «boom» inmobiliario.

Este registro municipal bebe como principal fuente de las denuncias que realizan los propios vecinos, puesto que la Gerencia no actúa de oficio.

En otras ocasiones, son los agentes de la Policía Local quienes dan parte del abandono y, si reviste gravedad, técnicos municipales realizan una visita al inmueble y emiten un informe. Según la Gerencia de Urbanismo, por lo general se trata de expedientes que «se resuelven en un corto período de tiempo».

En el censo municipal no se incluyen los datos relativos al Área de Rehabilitación Concertada de la Axerquía Norte. Las actuaciones proyectadas en 775 viviendas, que impulsan la Consejería de Obras Públicas y Vimcorsa, están bajo la coordinación de una oficina.

Según un estudio técnico previo, el 71 por ciento de las casas de vecinos presenta un estado deficiente o muy deficiente en esta zona y subraya la situación de deterioro de las calles perpendiculares a Muro de la Misericordia, Moriscos y Costanillas, donde se encuentra la vivienda que se vino abajo el pasado viernes en la calle Palomares.

El trágico derrumbe, que se llevó por delante a un matrimonio y dejó malherido a su hijo pequeño, ha hecho reaccionar a las asociaciones vecinales del Casco, que exigen al Consistorio que aceleren la aplicación de la ordenanza municipal de Inspección Técnica de Edificios, que acumula seis años de retraso.

Ayer la Asociación de Vecinos Galea Vetus, de San Agustín solicitó al presidente del Consejo de Distrito del Centro, Pedro Antúnez, una reunión para tratar este asunto y agilizar las medidas recogidas en el Área de Rehabilitación Concertada de la Axerquía Norte.

Fuente: ABC de Córdoba