Los edificios oficiales también pasarán la ITE y habrá un registro de las viviendas a inspeccionar

ABC Madrid
SARA MEDIALDEA
22-12-2003 08:19:54

MADRID. Todos los inmuebles oficiales tendrán que pasar la Inspección Técnica de Edificios (ITE), de la que hasta ahora estaban exentos. La medida, que afectará al mismísimo Palacio de Correos -futura sede del Ayuntamiento madrileño-, o a la sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid, en la Puerta del Sol, es una de las novedades de la modificación de la Ordenanza de Conservación, Rehabilitación y Estado Ruinoso de las Edificaciones, que hoy será aprobada por el pleno municipal.

Entre los cambios que se van a introducir, además del señalado, está otro de calado: se va a elaborar un registro municipal de los edificios que tienen que pasar la ITE.

El registro, que recogerá la totalidad de las construcciones que tienen obligación de pasar esta inspección en un ejercicio concreto, se expondrá al público durante un plazo de treinta días dentro del año anterior al inicio del plazo establecido para pasarla.

La modificación de la ordenanza se lleva al pleno de diciembre, y afecta al capítulo 4, título I, de la misma -artículos 28 al 35-.

Inmuebles con más de 30 años
Los cambios también afectan a los edificios con más de 30 años, que estarán obligados a pasar la ITE , según establece la Ley del Suelo. Las siguientes inspecciones tendrán que realizarse cada 10 años, en lugar al año siguiente a cumplir los diez desde la anterior inspección, que es lo que decía hasta ahora la Ordenanza.

Pero no son éstas las únicas novedades: una vez que el pleno le dé su apoyo, la normativa suprimirá la exigencia de adjuntar con la ITE la solicitud de licencia en caso de tener una inspección desfavorable.

A esto se añade que si un técnico colegiado que realice la inspección detecta una deficiencia importante en el inmueble, el Ayuntamiento podrá dictar la orden de reparación del inmueble según ese informe, sin necesidad de que un técnico municipal tenga que corroborarlo.

Sistema sancionador
El sistema sancionador de la nueva ordenanza se basará en la Ley de Procedimiento Administrativo Común. En el nuevo texto normativo, se prevé la creación de empresas privadas que se especialicen en la inspección de edificios, siempre que hayan sido autorizadas para ello por la Administración.

La Ordenanza sobre Conservación, Rehabilitación y Estado Ruinoso de las Edificaciones fue aprobada por el pleno municipal en 1999, y en 2002 se modificó para adaptarla a la nueva Ley del Suelo de la Comunidad, excepto los artículos correspondientes a la ITE, que no sufrieron modificación más que en su numeración.

Las inspecciones técnicas de edificios realizadas hasta el 31 de octubre de este año ascienden a 31.468. De ellas, el 45 por ciento tuvieron un dictamen negativo, lo que significa que los propietarios de los inmuebles están obligados a realizar reparaciones -de mayor o menor gravedad- para mantener la casa en condiciones de seguridad.

La inspección, no obstante, no se ejecuta en todos los inmuebles: a los antes citados hay que añadir otros 11.000 que no se tramitaron por distintas razones: o porque son edificios públicos, que hasta ahora estaban exentos de este control; o por haber sufrido rehabilitaciones que hacen que se retrase la fecha de la inspección; o por peticiones de prórroga de la propiedad; o por ser un edificio con dos direcciones -por dar a dos calles-.

Diez años de plazo
La ITE se inició en el año 2000, aunque ese primer ejercicio se prorrogó durante todo el año siguiente por las dificultades que se pusieron en evidencia al arrancar la medida. En un principio, se calculó que la revisión se realizaría en todos los edificios de Madrid en un plazo de cinco años, pero este plazo se dobló hasta los diez a la vista de la complicación de la tarea.

De acuerdo con los datos oficiales, hay alrededor de 180.000 direcciones susceptibles de pasar la ITE, que una vez eliminados los hasta ahora exentos inmuebles públicos y los duplicados, se quedarían en 130.000.

Fachadas y azoteas, lo peor
Las primeras ITE dieron porcentajes desfavorables de hasta un 60 por ciento, lo que se justificaba porque el sistema se estrenó con la revisión de los edificios con más antigüedad. Ahora, sin embargo, las inspecciones que detectan deficiencias de obligada subsanación no superan el 45 por ciento.

Entre los principales problemas que se detectan durante estos exámenes de los edificios, el 18 por ciento se refieren al estado de la estructura, y el 38 por ciento afectan al estado de las fachadas y medianerías.

Además, en un 23 por ciento el «suspenso» se lo lleva el estado de las cubiertas y las azoteas de los edificios, mientras que en un 21 por ciento de las ocasiones los problemas se detectan en la fontanería y la red de saneamiento del inmueble.

Fuente: ABC